Personalidad

I.-

Pablo va caminando a trompicones, recogiendo castañas del Paseo del Perú para su cubo naranja. Estas relucen sobre un camino que va cayendo en la penumbra, algún sin hogar ya está tumbado en el banco más cercano, mientras un anciano se le queda sonriendo, cuando llegamos a la Plaza de Costa Rica. Cerca veo el monumento a los Hermanos Alvarez Quintero, apenas intuido, me fijo en lo bien que va vestido el caballista y como siempre, se me llena la cabeza de recuerdos. El niño me reclama rápidamente, me coge la mano y me dirige al carro donde está Patricia.

II.- 

Durante la semana, en una práctica sobre el principio de igualdad/no discriminación, voy relatando la forma que tenemos de mantener una cierta conciliación familiar/laboral. Voy indicando mis quehaceres en la casa y, mientras voy engrandeciendo estas, haciéndolas ver como voluntarias - mi auditorio es predominantemente femenino-, tengo un momento de lucidez. Más tarde, me reiré viendo una pequeña intervención de Slavoj Zizek (personality) que va a cuento. Y entonces le digo a mi audiencia que estoy mintiendo; no, no hago tantas cosas ni tan voluntariamente. No creo que se trata de una de esas identidades escénicas - como es lo común en las redes sociales-, construidas sobre lo que "verdaderamente" quieres ser. Configuro, para tranquilidad inicial de las alumnas, la imagen de un sólo hombre - no creo que haya muchos- que realmente se cree que es posible la construcción social de una comunidad igualitaria hombre/mujer. Alguna me pide la razón por la que les he engañado. La contesto diciendo que :"una característica de nuestra conducta es la construcción posterior de relatos que justifiquen comportamientos. La llamada historia que permite ver ese yo interior. Suele hacerse poniendo los tintes más positivos. La auto conciencia lleva en ocasiones a parar el relato cuando el mismo resulta totalmente distorsionado". Realmente, creo que lo he ido haciendo para que no crean que el mundo es tan terrorífico como es, lo que pasa es que, si hubiera seguido, me hubiera convertido en alguien que ellas hubieran entendido - empaticamente-.  Es más adecuado que no sea así, ya que si creen conocerme - y junto a mi, a multitud de hombres que falsean la realidad- no podrán enfrentarse a lo que ellas creen excepcional: el individuo moderno.

Primera inclusión- Conviene indicar que, conforme a la indicación kantiana, el individuo es capaz, mediante la razón, de examinar su propio comportamiento. Este reflejo subjetivo  de la autoconciencia es muy liberal para nosotros mismos;  debe censurarse, puesto que ha eliminado objetivamente la posibilidad de que se examinara nuestra actuación por otro, a la luz de lo divino (Confesión en la Catolicidad) o a la luz de nuestra posición o función en la sociedad (confesión en el proceso staliniano). Las consecuencias de ambos juicios externos eran más determinantes que nuestra posición conmisericordiosa. 

III.-

Cada día me doy cuenta que releo más que leo. Otra alumna, de origen judío argentino, me lleva a releer Noche y Niebla en el Paris ocupado de Fernando Castillo. Un impulso para volver a Patrick Modiano, me espera, Un pedigrí. Ya contaré.